ES NAVIDAD Y HA NEVADO EN LA CIUDAD
Es navidad y ha nevado en la ciudad, y como cada año algunas ciudades de todo el mundo se cubren de nieve y alegría.
En uno de tantos callejones de esta enorme urbe en algún lugar del mundo, se encuentra un pequeño huérfano acurrucado entre los basureros, tratando de cubrirse del desgraciado frió. El niño tenia todas las pertenencias que podía poseer: su ropita rota y una lata de frijoles fríos que horas antes había robado a unos vagabundos que peleaban por ella.
La lata de frijoles .... esa iba a ser su cena de navidad y tal vez el único alimento que comería en toda la semana.
En ese callejón, además de los basureros, las ratas y el nauseabundo aroma a orines, había una pequeña ventana que daba al interior de una casa de la cual salían risas y un inconfundible olor a pavo. El pequeño niño, muerto por l curiosidad decidió mirar por la ventana para ver que pasaba y estupefacto por lo que observo soltó una mirada.
En esa casa se encontraba un hermoso pino adornado con luces y muñequitos, el cual estaba lleno de regalos, una chimenea que calentaba el interior de la casa y una mesa que sin ser tan grande alcanzaba a reunir a una pequeña familia de clase media baja habían 5 niños de entre 7 y 9 años entre ellos unos trillizos y una niña de 6 años de edad que jugaban, correteándose por toda la casa, además, una hermosa mujer que ponía la mesa: era la mama de aquellos niños afortunados.
Para el pequeño niño, esta era una hermosa imagen que seria cerrada, varias horas después por la llegada del padre; cuando el hombre de la familia entro al hogar, todos los niños se le abalanzaron y lo recibieron con besos y abrazos, mientras que la esposa le daba una bella noticia, que cualquier padre de todo el mundo podría escuchar: ya no serian 8 sino 9 integrantes de la familia, su esposa estaba embarazada.
El hombre, atónito beso a su esposa en la frente y le menciono que era la navidad mas bella que había tenido; las lagrimas brotaron de los ojos del pequeño infante y rodaron por sus mejillas, hasta caer al suelo cubierto de nieve; en su interior se encontraba una mezcla de emociones que iban de la alegría a la envidia, por saber que habían niños mas afortunados que el , que no habían sido abandonados.
El reloj de la plaza principal daba diez campanadas, cuando la mujer saco el pavo del horno y puso un modesto manjar en la mesa.
Como era costumbre antes de cenar daban gracias a dios por os sagrados alimentos que comerían y pedían por todos aquellos que no podían gozar de una cena; el niño enojado y en un arranque de rabia lanzo su lata de frijoles hacia el basurero al comparar su comida con el banquete que había dentro: fideos calientes, frijoles, ensalada de manzana, agua de horchata y pavo ese era el manjar que deleitarían los 8 integrantes de la familia.
Cuando terminaron de rezar la pequeña niña se percato de la manera en que el pequeño vagabundo había tirado su lata de frijoles. Corto con dificultad una pierna de pavo y tomando en un palto desechable se dirigió a la puerta; en la casa todos se quedaron anonadados con la acción de la niña, mientras que el pequeño vagabundo, corrió hacia la entrada del hogar donde se llevaba a cabo la celebración.
Con dificultad la puerta se abrió y se alcanzo a ver la silueta de la niña que sostenía el plato con la pequeña ración de comida.
La niña miro a los ojos al pequeño huérfano y en un gesto de generosidad extendió los brazos. ¿acaso esa era la señal de que la bondad aun existía en el mundo?, ¿seria un presagio de que dios se había compadecido de el?, ¿o tal vez seria que la oración que hacia cada mañana había sido escuchada?. No, mientras el pequeño niño se preguntaba esto y mas la dulce niña tiro el plato al suelo y comenzó a pisotearlo y a brincar sobre el. El niño soltó un grito de desesperación mientras la niña se reía inconteniblemente por la cara y la reacción del pequeño vagabundo.
Una vez que es divirtió lo sufriente entro a la casa y azoto la puerta. El niño trato de rescatar lo poco que había quedado de la comida, pero todo fe demasiado tarde, las ratas lo superaban en numero...
ES NAVIDAD, Y HA NEVADO EN LA CIUDAD...
Los elementos que pudimos identificar fue:
v el espacio geográfico pues como todo tiene un lugar de lo sucedido
v temporalidad y cambio ya que nos remonta a una estación del año
Es navidad y ha nevado en la ciudad, y como cada año algunas ciudades de todo el mundo se cubren de nieve y alegría.
En uno de tantos callejones de esta enorme urbe en algún lugar del mundo, se encuentra un pequeño huérfano acurrucado entre los basureros, tratando de cubrirse del desgraciado frió. El niño tenia todas las pertenencias que podía poseer: su ropita rota y una lata de frijoles fríos que horas antes había robado a unos vagabundos que peleaban por ella.
La lata de frijoles .... esa iba a ser su cena de navidad y tal vez el único alimento que comería en toda la semana.
En ese callejón, además de los basureros, las ratas y el nauseabundo aroma a orines, había una pequeña ventana que daba al interior de una casa de la cual salían risas y un inconfundible olor a pavo. El pequeño niño, muerto por l curiosidad decidió mirar por la ventana para ver que pasaba y estupefacto por lo que observo soltó una mirada.
En esa casa se encontraba un hermoso pino adornado con luces y muñequitos, el cual estaba lleno de regalos, una chimenea que calentaba el interior de la casa y una mesa que sin ser tan grande alcanzaba a reunir a una pequeña familia de clase media baja habían 5 niños de entre 7 y 9 años entre ellos unos trillizos y una niña de 6 años de edad que jugaban, correteándose por toda la casa, además, una hermosa mujer que ponía la mesa: era la mama de aquellos niños afortunados.
Para el pequeño niño, esta era una hermosa imagen que seria cerrada, varias horas después por la llegada del padre; cuando el hombre de la familia entro al hogar, todos los niños se le abalanzaron y lo recibieron con besos y abrazos, mientras que la esposa le daba una bella noticia, que cualquier padre de todo el mundo podría escuchar: ya no serian 8 sino 9 integrantes de la familia, su esposa estaba embarazada.
El hombre, atónito beso a su esposa en la frente y le menciono que era la navidad mas bella que había tenido; las lagrimas brotaron de los ojos del pequeño infante y rodaron por sus mejillas, hasta caer al suelo cubierto de nieve; en su interior se encontraba una mezcla de emociones que iban de la alegría a la envidia, por saber que habían niños mas afortunados que el , que no habían sido abandonados.
El reloj de la plaza principal daba diez campanadas, cuando la mujer saco el pavo del horno y puso un modesto manjar en la mesa.
Como era costumbre antes de cenar daban gracias a dios por os sagrados alimentos que comerían y pedían por todos aquellos que no podían gozar de una cena; el niño enojado y en un arranque de rabia lanzo su lata de frijoles hacia el basurero al comparar su comida con el banquete que había dentro: fideos calientes, frijoles, ensalada de manzana, agua de horchata y pavo ese era el manjar que deleitarían los 8 integrantes de la familia.
Cuando terminaron de rezar la pequeña niña se percato de la manera en que el pequeño vagabundo había tirado su lata de frijoles. Corto con dificultad una pierna de pavo y tomando en un palto desechable se dirigió a la puerta; en la casa todos se quedaron anonadados con la acción de la niña, mientras que el pequeño vagabundo, corrió hacia la entrada del hogar donde se llevaba a cabo la celebración.
Con dificultad la puerta se abrió y se alcanzo a ver la silueta de la niña que sostenía el plato con la pequeña ración de comida.
La niña miro a los ojos al pequeño huérfano y en un gesto de generosidad extendió los brazos. ¿acaso esa era la señal de que la bondad aun existía en el mundo?, ¿seria un presagio de que dios se había compadecido de el?, ¿o tal vez seria que la oración que hacia cada mañana había sido escuchada?. No, mientras el pequeño niño se preguntaba esto y mas la dulce niña tiro el plato al suelo y comenzó a pisotearlo y a brincar sobre el. El niño soltó un grito de desesperación mientras la niña se reía inconteniblemente por la cara y la reacción del pequeño vagabundo.
Una vez que es divirtió lo sufriente entro a la casa y azoto la puerta. El niño trato de rescatar lo poco que había quedado de la comida, pero todo fe demasiado tarde, las ratas lo superaban en numero...
ES NAVIDAD, Y HA NEVADO EN LA CIUDAD...
Los elementos que pudimos identificar fue:
v el espacio geográfico pues como todo tiene un lugar de lo sucedido
v temporalidad y cambio ya que nos remonta a una estación del año
